¿Ha pensado en hacer leche de almendras en casa? Es más fácil de lo que cree y le proporcionará una versión más fresca, sana y asequible que la comprada en la tienda.
Esta guía le mostrará cómo hacer leche de almendras utilizando un exprimidor, desde remojar las almendras hasta colar la leche. ¡Le guiaremos paso a paso de principio a fin!
Aprenda a aromatizar de forma natural la leche de almendras con algunos consejos nuestros sobre la mejor forma de almacenarla y conservar su frescura.
¿Está listo para probar a hacer comida casera leche de almendras? Comencemos.
¿Por qué leche de almendras casera?
Elaborar leche de almendras desde cero en casa ofrece varias ventajas. La primera y más importante son los beneficios para la salud; además, las versiones caseras contienen menos aditivos.
La leche de almendras comprada en la tienda puede contener aditivos y conservantes, como espesantes como el Cartagena, que pueden causar problemas digestivos; las versiones caseras, sin embargo, no contienen tales materiales añadidos.
La leche de almendras casera también puede ser más rentable. Aunque las almendras puedan parecer caras, una taza puede producir hasta cuatro tazas de leche casera a un coste mucho más razonable que las alternativas compradas en la tienda.
Elaborar leche de almendras en casa es mejor para el medio ambiente de múltiples maneras, desde la reducción de la demanda de productos envasados y de los residuos generados, hasta la utilización de la pulpa sobrante de diversas formas, ¡reduciendo aún más los residuos!
La leche de almendras casera es más sana, más barata y más respetuosa con el medio ambiente que las versiones compradas en la tienda, ¡por no mencionar que es fácil de hacer! Déjeme mostrarle cómo.
Antes de comenzar el proceso de elaboración de leche de almendras en casa, reunamos todos los utensilios e ingredientes necesarios. La elaboración casera implica algunos utensilios de cocina básicos, así como dos ingredientes clave, ¡elementos esenciales para el éxito!
Lista de equipos
Aquí tiene el equipo que necesitará:
- Un exprimidor de buena calidad
- Un bol grande
- Un colador o una bolsa para leche de frutos secos
- Contenedores de almacenamiento
Un exprimidor de alta calidad es clave para sacar el máximo partido a sus almendras. Un colador o una bolsa para leche de frutos secos son necesarios para conseguir una textura suave. Y, por supuesto, necesitará recipientes para almacenar su leche de almendras casera.
Ingredientes
En cuanto a los ingredientes, necesitará:
- Almendras crudas
- Agua
Ya está. La belleza de la leche de almendras casera reside en su sencillez. Sólo dos ingredientes, pero el resultado es una bebida deliciosa y nutritiva. Más adelante hablaremos de los complementos opcionales como edulcorantes y saborizantes.
Cómo preparar sus almendras
El primer paso para hacer leche de almendras casera es preparar las almendras. Esto implica ponerlas en remojo, lo que es crucial por un par de razones.
En primer lugar, remojar las almendras activa las enzimas que mejoran la digestibilidad. Esto significa que su cuerpo puede absorber más nutrientes de las almendras. En segundo lugar, el remojo ablanda las almendras, haciéndolas más fáciles de exprimir.
Remojar las almendras: El primer paso
Para remojar sus almendras, simplemente colóquelas en un bol grande y cúbralas con agua. Las almendras se expandirán al remojarse, así que asegúrese de utilizar agua en abundancia.
Deje las almendras en remojo toda la noche, o al menos durante 8 horas. Después del remojo, escurra y enjuague las almendras. Ya están listas para convertirse en deliciosa leche de almendras casera.
Cómo hacer leche de almendras en un exprimidor
Ahora que sus almendras están preparadas, es el momento de hacer leche de almendras. El proceso es sencillo y rápido, especialmente si utiliza un exprimidor.
Comience añadiendo sus almendras remojadas y enjuagadas al exprimidor. Por cada taza de almendras, añada 2-3 tazas de agua. Esta proporción le proporcionará una leche de almendras cremosa y rica.
A continuación, encienda su exprimidor y deje que haga el trabajo. El exprimidor separará la pulpa de almendra de la leche.
Instrucciones paso a paso
Aquí tiene una guía detallada paso a paso sobre cómo hacer leche de almendras en un exprimidor:
- Añada 1 taza de almendras remojadas y enjuagadas al exprimidor.
- Vierta 2-3 tazas de agua.
- Encienda el exprimidor y déjelo funcionar hasta que se hayan procesado todas las almendras.
- Una vez que el exprimidor haya procesado todas las almendras, le quedará una jarra de leche de almendras fresca y casera y un poco de pulpa de almendra.
- ¡No deseche la pulpa! Hablaremos de cómo puede utilizarla más adelante en este artículo.
Y ¡ahí lo tiene! Acaba de preparar su propia leche de almendras casera. Es así de sencillo.
Aromatizar su leche de almendras
Ahora que ya tiene su leche de almendras básica, quizá quiera añadirle algo de sabor. Aunque la leche de almendras es deliciosa por sí sola, un poco de edulcorante o saborizante puede hacerla aún mejor.
Edulcorantes naturales y complementos de sabor
Considere añadir un toque de edulcorante natural como miel, sirope de arce o dátiles. Estos pueden mezclarse con la leche después de colarla.
Para darle un toque de sabor, pruebe a añadir un chorrito de extracto de vainilla o una pizca de canela. Estos complementos pueden transformar su leche de almendras casera en una deliciosa golosina.
Colar para suavizar
Después de hacer el zumo, es posible que su leche de almendras aún contenga algunas partículas finas de almendra. Para conseguir una textura más suave, tendrá que colar su leche.
Cómo colar su leche de almendras
Vierta la leche de almendras lentamente a través de una bolsa para leche de frutos secos o un colador de malla fina. Esto atrapará cualquier resto de pulpa de almendra.
Asegúrese de exprimir todo el líquido posible. Cuanto más suave sea su leche, más agradable le resultará beberla.
Cómo almacenar su leche de almendras
Ahora que ha elaborado su leche de almendras, es el momento de conservarla adecuadamente. La leche de almendras casera no contiene conservantes, por lo que debe refrigerarse.
Consejos de conservación y almacenamiento
Normalmente, la leche de almendras casera dura entre 3 y 5 días en el frigorífico. Recuerde siempre agitarla bien antes de usarla, ya que tiende a separarse.
Para un fácil acceso, guarde su leche de almendras en una botella de cristal transparente. No olvide etiquetarla y fecharla para controlar su frescura.
Cómo utilizar la pulpa de almendra sobrante
Después de hacer la leche de almendras, le quedará pulpa de almendras.
Ideas creativas para la pulpa de almendra
Puede utilizar la pulpa de almendra en repostería. También puede secarla y utilizarla como harina de almendra.
Otra idea divertida es utilizarlo como exfoliante facial natural. Es suave con la piel y está lleno de nutrientes.
Preguntas frecuentes sobre la leche de almendras casera
Elaborar leche de almendras casera puede suscitar algunas preguntas, sobre todo si es nuevo en el proceso.
Preguntas comunes contestadas
¿Puedo congelar la leche de almendras casera? Sí, puede. Sin embargo, la textura puede cambiar ligeramente al descongelarla. Es mejor utilizarla en batidos o cocinarla después de congelarla.
¿Cómo puedo hacer leche de almendras sin un exprimidor? Puede utilizar una licuadora en su lugar. El proceso es similar, pero tendrá que colar la leche a través de una bolsa para leche de frutos secos o una estopilla para eliminar la pulpa.
¿Por qué se separa mi leche de almendras? La separación es natural en la leche de almendras casera, ya que carece de los estabilizantes que se encuentran en las versiones compradas en la tienda. Sólo tiene que agitarla bien antes de usarla.
Vídeo de cómo hacer leche de almendras
Fomentar la experimentación y el intercambio
Recuerde, la belleza de hacer su propia leche de almendras es la libertad de experimentar. Pruebe diferentes proporciones de almendras y agua, o añada sus edulcorantes y sabores favoritos.